La reacción de la céllula delictiva ocurrió tras la destrucción de su campamentos clandestino 

Luego de que elementos policiales destruyeran un campamento criminal comenzó un enfrentamiento armado entre integrantes de un grupo delictivo y los efectivos.

Los oficiales de la Policía Estatal Preventiva (PEP), realizaban un recorrido de vigilancia sobre la carretera entre la comunidad El Cargadero y Guadalupe Victoria, donde fueron atacados a balazos.

Ante esto, los policías respondieron el ataque que, por la oscuridad de la noche fue complicado ubicar a los agresores quienes se escondían entre los matorrales.

Según la versión de las autoridades ni los efectivos ni los civiles resultaron heridos ni abatidos.