Zacatecas. Tras años de abandono, el gobernadorTello invierte en la preservación de 22 mil libros antiguos, algunos del siglo XVI
Más de 22 mil libros, de los siglos XVI al XIX mayoritariamente, que guardan parte de la historia religiosa, humanista, filosófica y científica de Zacatecas y el mundo, están resguardados y exhibidos en la biblioteca de colecciones especiales Elías Amador, un sitio que por sus características es un tesoro invaluable de América.
Consciente de la responsabilidad que implica resguardar ese patrimonio histórico agrupado desde 1832, a través de la Red Estatal de Bibliotecas, el Gobierno de Alejandro Tello le ha puesto especial atención.
Tras años de abandono, y después de ser la Elías Amador una biblioteca sin presupuesto propio, desde la llegada del mandatario le han hecho inversiones que permiten mejorar la custodia de los manuscritos y libros impresos que siglos atrás pertenecieron a órdenes religiosas o fondos particulares.
Simitrio Quezada Martínez, coordinador estatal de bibliotecas, informó que en esta administración compraron un deshumidificador, que desde hace años se requería, ya que usaban ventiladores para proteger los libros de la humedad.
También invirtieron en la renovación de focos especiales para el cuidado del material de los libros antiguos, compraron computadoras y destinaron más personal; “en esta biblioteca tenemos una responsabilidad histórica, no podemos permitir que se maltrate una sola página”, detalló Quezada.
Nace en 1832 y su libro más antiguo es de 1509
La biblioteca de colecciones especiales Elías Amador es un recinto principalmente utilizado por los investigadores, sin embargo, al preservar la filosofía con la que nació: ser una biblioteca pública, democrática y gratuita, dan visitas guiadas gratis a cualquier persona interesada y a grupos escolares.
“Todos los zacatecanos deberían conocer esta biblioteca porque es su patrimonio, y tiene especialistas que aquí trabajamos que los vamos a guiar”, dijo Juan Carlos Ochoa Valenzuela, director de la Biblioteca.
Entre los tesoros que el visitante puede encontrar está el libro más antiguo que guarda la Elías Amador: Racionale Divinorum Officiorum, un texto en latín que gira en torno al ritual católico y la homilía, el cual fue editado en 1509 en Venecia, Italia.
También destacan, El tratado de destrucción de las Indias, de 1552 y que perteneció a la Propaganda Fide, así como Malleus Maleficarum (El Martillo de las Brujas), editado en Lyon, Francia, un libro que ayudaba a identificar y cazar brujas durante la Santa Inquisición.
Juan Carlos Ochoa explicó que la biblioteca nació en 1832, gracias al grupo político de Francisco García Salinas, Valentín Gómez Farías, Luis de la Rosa Oteiza, entre otros, quienes consideraron como su proyecto de nación, entre otras acciones, la fundación de la biblioteca pública.
Es así que con las leyes de reforma en el siglo XIX y la expropiación de los bienes eclesiásticos, la biblioteca se conformó de 16 mil obras de fondo antiguo de las órdenes: dominicas, agustinas, juaninas, franciscanas y jesuitas.
Más tarde, se complementó con fondos como el de Jesús González Ortega, Gustavo Bustamante y otros que crecieron el acervo a los más de 22 mil ejemplares. Todos con testimonio de pertenencia; es decir, marca de fuego, manuscrito y otras características.
Las obras están en diversos idiomas y abordan temas religiosos, de filosofía, matemática, ciencia y literatura, en general el universo es muy amplio. También cuenta con un catálogo en línea en www.bibliotecaeliasamador/seduzac/acervo, el cual cumple con los seis campos de investigación, dijo el Director de la Biblioteca.
Juan Carlos Ochoa aseguró que aún falta mucho trabajo historiográfico por realizar en la Elías Amador, “hay enormes líneas de investigación para contribuir al patrimonio documental del fondo antiguo”.
Por ese motivo, durante el actual Gobierno, se ha impulsado una agenda académica que ha permitido conocer más la biblioteca, mediante coloquios y talleres que al adentrarse al mundo del libro han sorprendido en el proceso de investigación, al encontrar primeras ediciones, testimonios de pertenencia y otras peculiaridades que dan mayor valor al texto.
“Zacatecas es afortunado por tener esta biblioteca, es una institución de larga duración, con 187 años de vida es una de las más antiguas del estado y toda una responsabilidad para los zacatecanos de proteger el patrimonio”, señaló.
“A partir del Gobierno de Alejandro Tello se ha vuelto a hablar de bibliotecas en Zacatecas y algunos abandonos e inercias han sido superados”, añadió el Coordinador de Bibliotecas, Simitrio Quezada.
La Biblioteca Elías Amador tiene un horario de 9 de la mañana a 3 de la tarde de lunes a viernes, y está ubicada al interior del Museo Pedro Coronel, en el centro histórico de la capital.