Sagarpa benefició a 417 agricultores de Río Grande, más otros grupos solicitantes de Sombrerete y Sain Alto
Río Grande, Zac. La Secretaría de Agricultura y Ganadería (Sagarpa) entregó 417 paquetes a igual número de agricultores del Programa de Incentivos a Productores de Maíz y Frijol (PIMAF), con un valor de 2 millones 752 mil 200 pesos.
El paquete consistió en la entrega de un aspersor de tipo mochila, cada productor tiene derecho a lo correspondiente a máximo tres hectáreas lo equivalente a tres bultos de fertilizante de 50 kilogramos cada uno, un litro de fertilizante y dos kilos de insecticida, este tipo de fertilizantes son químicos y orgánicos que ya se repartieron en los municipios de Sombrerete, Sain Alto y Río Grande.
Por parte de la dirección de Desarrollo Agropecuario de Río Grande, encabezada por Carlos Valentín Samaniego Castañeda, se informó que se recibieron solicitudes para ser beneficiario de estos paquetes, en puerta las temporada de siembra y en coordinación con la Sagarpa se obvia a los beneficiarios la adquisición de fertilizantes en empresas privadas, que es costoso.
Indicó que “se recomienda fertilización foliar cuando las condiciones ambientales limitan la absorción de nutrientes por las raíces, tales condiciones pueden incluir pH de suelo alto o bajo, estrés por temperatura, humedad de suelo demasiada baja o alta, existencia de enfermedades radiculares, presencia de plagas que afectan a la absorción de nutrientes, desequilibrios de nutrientes en el suelo”.
Añadió que “una de las ventajas de la fertilización foliar es la rápida respuesta de la planta a la aplicación de nutrientes, la eficiencia de la absorción de nutrientes se considera que es 8-9 veces mayor cuando se aplican nutrientes a las hojas, en comparación a los nutrientes aplicados al suelo”.
Por otra parte dijo que “la fertilización orgánica no representa riesgo alguno en relación con la contaminación del agua subterránea y superficial a través de plaguicidas sintéticos, la fertilización orgánica permite que los ecosistemas se adapten mejor a los efectos de los cambios climáticos y posee un potencial mayor para reducir las emisiones de gas invernadero y abrigo para artrópodos y pájaros beneficiosos, que contribuyen de esta manera al control natural de las plagas”.