Los contribuyentes pagarán el dinero que Pemex dejará de aportar al presupuesto
No bajarán los precios de gasolinas; IVA en medicinas y alimentos, inminente
El PRD, “un monstruo que da miedo”
Persiste la violencia en el país, pero los medios maquillan la realidad, dice el politólogo
ANGEL AMADOR SANCHEZ
Con la aprobación de la reforma energética y sus leyes secundarias, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se convertirá en el “brazo armado” del Estado mexicano, advierte Rubén Ibarra Reyes, doctor en Ciencia Política por la Universidad Autónoma de Zacatecas.
El “brazo armado”, explica el también director de la Maestría en Ciencias Sociales de la UAZ, ejecutará una reforma fiscal integral, agresiva, para compensar –vía recaudación- el dinero que Petróleos Mexicanos (60%) dejará de aportar al presupuesto público federal.
¿De dónde saldrá el dinero?, se pregunta y enseguida responde: ¡de los contribuyentes, de dónde más!
Y completa su planteamiento: la SHCP atacará principalmente el consumo para allegarse los recursos que dejará de aportar Pemex. La recaudación irá sobre el gasto corriente y el salario. Ampliará el universo de cobro, aunque ahora está gravado casi todo, desde la compra de un bien hasta la donación, por citar algunos ejemplos.
Para el investigador universitario, entrevistado en Radio Zacatecas en el programa Los Periodistas, el cobro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a medicamentos y alimentos se aplicará a corto plazo.
“La acción del brazo armado del gobierno federal no puede esperar, ya que la reciente reforma fiscal sólo fue una miscelánea sencilla que sentó las bases para un cambio estructural mucho más amplio en esta materia”.
Ibarra Reyes puntualiza que, por supuesto, México no es el único país en el que se cobran múltiples impuestos; por ejemplo, dice, en Alemania está gravado prácticamente todo.
Sin embargo, el punto toral, la gran diferencia es la distribución de la riqueza entre el país europeo y el nuestro.
Otro ejemplo: Suiza es un país que tiene privatizado casi todo, con recaudación fiscal severa que, digamos, suelta un poco el ahorro de las familias, los libera de mucho gravamen; en México no, además de que el salario es muy bajo comparado con ambas naciones.
“La recaudación pegará al consumo, porque el ciudadano común compra subsistencia y lujo”, reafirma.
En este contexto, señala que incentivar la instalación de empresas permite que no estén tan cargadas de impuestos. No obstante, con la miscelánea fiscal y la desaparición de Pemex como empresa del Estado, se fomentará la llegada de compañías extranjeras, pero no la creación de nacionales.
El director de la Maestría en Ciencias Sociales de la UAZ precisa que a la empresa mexicana se le cobra, mientras que las internacionales gozan de muchas facilidades. A la nacional le pegará mucho más la acción del “brazo armado”, insiste.
La llegada de empresas favorece, sí, el empleo, pero en México es mal pagado, por ello las foráneas se asientan en el país, por la mano de obra barata, y luego el Estado instala gasoductos, o cosas de éstas, para facilitarle su instalación, dice.
Y en este punto, sentencia: quien define las reformas estructurales no es el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ni el presidente Enrique Peña Nieto, sino son las empresas transnacionales.
UNA MENTIRA, REDUCCIÓN DE PRECIOS
Para Rubén Ibarra Reyes es una falacia y mentira absoluta el discurso de que bajarán los precios de gasolinas y servicios públicos tras la reforma energética. A corto y mediano plazo no se logrará tal disminución, pues no se puede pensar que una empresa privada arriesgue ganancia para que a la población le vaya un poco mejor, indica.
Por otra parte, subraya que uno de los riesgos más graves es que México dejará de tener la posibilidad de enfrentar una crisis económica severa a escala internacional; antes no pegaba tan fuerte porque se tenía la reserva petrolera que podía sacar adelante al país.
“No hay crisis económica en el mundo en la que un recurso natural se vaya a la baja; en todas las crisis, cualquier recurso renovable o no, se mantiene. Eso ha mantenido a Venezuela en una situación más o menos de equilibrio, con sus complicaciones, por supuesto; sin embargo, el país suramericano estaría mucho peor si no tuviera esa posibilidad”.
ASUNTO DE GEOPOLÍTICA
Durante la entrevista con Los Periodistas, Rubén Ibarra enmarca que la reforma energética es un asunto de geopolítica, o sea, una expresión de la reestructuración capitalista internacional, en la que incluye el actual conflicto en la Franja de Gaza, con los bombardeos de Israel a Palestina.
En el caso mexicano, agrega, la industria petrolera representaba demasiadas complicaciones, porque Pemex mantenía cierto equilibrio político interno, debido a que la otrora paraestatal permitía subsidios que ya no existirán con las leyes secundarias recién aprobadas por el Congreso de la Unión.
Además, mantenía una cierta economía tradicional, toda vez que el Estado recargaba su deuda pública en una fortaleza enorme.
“Sin embargo, hoy, Pemex, en vía de hechos y en vía de la ley, deja de ser del Estado, es decir, los procesos productivos son particulares, por más que nos digan que hay un riesgo compartido, bueno, si fuera así, entonces la deuda no sería pública, sino de quien tomó las decisiones para que una empresa del Estado tenga deuda”.
PRI FORTALECIDO; IZQUIERDA DIVIDIDA
Ante la crudeza de los planteamientos del entrevistado, se alude sobre la posibilidad del voto para contener los embates del capital transnacional, pero antes realiza un análisis de la situación de los partidos políticos y de la maltrecha democracia mexicana.
De entrada, el investigador apunta que el PRI está fortalecido en el territorio nacional, posicionamiento que se observará en las elecciones federales intermedias de 2015, en las que seguramente ganará una buena cantidad de curules en la Cámara de Diputados, más allá de la reforma energética.
“Uno pensaría mediáticamente que (las reformas estructurales) deben pegarle al PRI, pero el autoritarismo que ejerce este partido desde hace muchos años, permitirá que de alguna manera refrende ese voto”, critica.
El otro análisis tiene que ver con la izquierda, y es poco optimista:
Observa que el Partido del Trabajo (PT) está desfondado, mientras el Partido de la Revolución Democrática (PRD), de plano, se ha convertido en “un monstruo que da miedo”.
Respecto al partido de Andrés Manuel López Obrador, Movimiento Regeneración Nacional (Morena), destaca que es el más legítimo de los tres partidos nuevos (los otros son Encuentro Social y Partido Humanista) por la manera en que se funda, pero además tiene una base social en todo el país, ya que en 2012 el entonces candidato presidencial obtuvo 15 millones de votos.
El crecimiento de Morena puede incrementarse; la izquierda puede ganar ciertos adeptos, sobre todo del PRI porque el PAN está desfondado completamente, y no creo que PRD ni PT puedan cachar mucho en las elecciones del próximo año.
“El PRD votó muchos de los artículos que estaban reservados por el mismo partido para, supuestamente, resguardar a la misma sociedad; entonces, el ciudadano podrá pensar que es suficiente con el voto para castigar a un partido o a otro, pero el problema está en que terminaríamos castigando a todos”, indica.
LA DEMOCRACIA MEXICANA, EN CRISIS SEVERA
Respecto a la situación de la democracia mexicana, el análisis es sombrío, por decir lo menos: “está en crisis, seria, severa”, sintetiza.
El politólogo se asume como un crítico de la democracia representativa, pero reconoce que ésta se ha fortalecido durante los últimos 40 años y, aún más, de 1997 a la fecha. Empero, reitera, esa mini representación está en crisis severa.
“Ya ni los diputados representan a los mismos diputados, ya no pensemos en el ciudadano, al que dejaron de representar hace mucho tiempo, tampoco representan a su partido. Ya no definen prácticamente nada”.
Luego entonces, añade Ibarra Reyes, “bajo este esquema, sí, por supuesto, el ciudadano tiene en el voto la forma de manifestar su malestar, pero mientras tengamos esta clase política, México no va a cambiar”.
Es un tema de tejido social, de cultura política, de ciudadanía, es un tema estructural real, verdadero, puntualiza.
En cuanto a la izquierda manifiesta que dejó de lado todos sus ideales, todos. Incluso, ya no es idealista. No hay proyecto, porque viró hacia el pragmatismo total y absoluto del poder.
“La búsqueda del poder es lo que mueve en estos momentos a la izquierda, una izquierda, además, fragmentada”.
El analista universitario celebra la fundación de Morena, ya que se necesitaba que –cuando menos- algo sacudiera a la izquierda.
Acepta que el nuevo partido es viable en el sentido de idealismo, aunque visualiza que el problema de Morena se presentará en la definición de candidaturas para las elecciones de 2015, ahí estará el meollo debido a que pueden repetirse aspirantes de siempre, los que vienen –por ejemplo- del PT, PRD o Movimiento Ciudadano, candidatos reciclados.
La fundación del PRD en 1989, rememora, como proyecto político nacional, era muy interesante, tal vez hasta representaba la innovación de la izquierda latinoamericana, pero el sol azteca se convirtió en “un monstruo que da miedo”.
Y esta “izquierda de juguete que hay en México se reproduce en Zacatecas: fragmentada, dividida y poco confiable, eso es lo más grave”, remata.
Ante los micrófonos de Los Periodistas, Ibarra Reyes pregunta ¿por qué pega tanto el destape de Pedro de León Mojarro o de que si Alejandro Tello va o no a la gubernatura en 2016? Pega porque se destapó primero David Monreal Avila, pero no genera el eco que provoca el PRI en estos momentos.
SEGURIDAD
El tema de la violencia en México es un fenómeno cultural, no es algo que se pueda medir con los ministerios públicos o con empleo, porque no sólo es la delincuencia común que existe en todo el mundo, vinculada al sujeto que roba para comer o tener más, expresa en otro tema el especialista en asuntos políticos y sociales.
Refiere que la violencia está en todo el país, el Estado no ha logrado combatirla debido a que no se combate con violencia ni con policías. El Partido Acción Nacional (PAN), sobre todo en el sexenio de Felipe Calderón, enfrentó al crimen organizado de manera frontal, entonces por 10 caídos de la delincuencia, había 20 recontratados, señala.
“En los medios de comunicación se difunde la idea de que no pasa nada, se maquilla la realidad, pero la violencia no se ha ido”.
En el caso de Zacatecas, Rubén Ibarra Reyes acepta sin cortapisas que la violencia ha disminuido, pero lo importante es analizar los motivos de esta reducción: ¿por una acción eficaz del Estado o por qué a los delincuentes no les interesa ya la plaza?
Mientras llegan las respuestas, concluye:
“Zacatecas es una zona de traslado de la droga..., como siempre lo fue”.