Migrantes y superación de la crisis en cumbre bilateral México-USA, entre los temas
Filomeno Pinedo Rojas
En diálogo bilateral en la oficina Oval de la Casa Blanca realizada este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a su homólogo estadunidense, Joe Biden, la regularización de los migrantes que laboran en Estados Unidos desde hace años. Propuso la expedición de visas temporales para trabajadores mexicanos y centroamericanos y ofreció diversos apoyos que contendrán y disminuirán la inflación que padece el vecino país del Norte.
El primero de los cinco puntos expuestos por el mandatario mexicano a Biden para apoyar la economía de los consumidores del vecino país, es el de permitir que los norteamericanos de la franja fronteriza puedan pasar a las gasolinerías de México a abastecerse de combustible ahorrándose más de 33 pesos por galón, ya que en el país vecino la gasolina se disparó de precio. Se puede atender al doble de los automovilistas que actualmente pasan la frontera para llenar sus tanques de combustible, mismo que se produce en la nueva refinería que adquirió nuestro país en Texas, precisó López Obrador.
Además, se ofreció transportar gas de Texas a los estados de Nuevo México, Arizona y California a través de Mil kilómetros de gasoductos mexicanos que pueden abastecer la demanda de unos 3 millones de consumidores de esos estados, equivalentes a unos 750 mega watts de energía, con lo que se abaratarían las tarifas.
Por otra parte, López Obrador recomendó la suspensión de ciertos aranceles a la importación de alimentos y bienes que se envían desde México, así como la eliminación de “trámites insidiosos” que solo retrasan el abasto y encarecen los precios a los consumidores norteamericanos.
Para el mediano plazo, expuso el presidente de México a un atento Joe Biden, debe fortalecerse la cooperación entre ambos países para producir los bienes que se importan de otras regiones y continentes aclarando que, por lo pronto, el gobierno mexicano trabaja con inversionistas estadounidenses en la construcción de una planta de licuefacción de gas y la construcción de plantas fotovoltaicas en Sonora, que pueden exportar energía a los estados fronterizos del país del norte. De pasada, AMLO destacó la nacionalización del Litio que es un mineral estratégico para la industria automovilística instalada en ambos países y que, cada vez más, producirán autos eléctricos.
Por último, e igual o más relevante, el presidente mexicano, que prácticamente dominó la conversación, pidió al mandatario de Estados Unidos que regularice la situación de los migrantes que desde hace años trabajan “honradamente” para el desarrollo de ese país, y acabar así con la incertidumbre. Al mismo tiempo que se expidan visas temporales de trabajo para que técnicos y profesionistas de México y Centroamérica puedan ingresar y apoyar las actividades económicas del país vecino, especialmente para que no se detenga el plan de obras de infraestructura del presidente Biden en el que se propone invertir Un billón de dólares.
López Obrador aconsejó a Joe Biden que impulse, con arrojo, un programa atrevido de transformaciones que cambien a su país y superen el “status quo”, aunque los conservadores de su país “pongan el grito en el cielo”, porque “la superación de la crisis no está en el conservadurismo, sino en la transformación” con desarrollo y bienestar.
Por su parte el presidente norteamericano dijo estar “muy ansioso por ver como trabajar los cinco puntos que Usted ha propuesto”, refrendando la voluntad de continuar en la integración económica de la región.