Zacatecas. Las venden en distintas presentaciones con precios que van de 10 a 35 pesos
Desde los seis años Samuel García Galván, habitante de San Jerónimo, comunidad ubicada en el municipio de Melchor Ocampo, aprendió de su familia el oficio de recolección de candelilla (Euphorbia antisyphilitica), para la extracción y venta de cera por kilo.
La cera que se obtiene a partir de esta planta es un producto muy demandado que se emplea como agente endurecedor de otras ceras y productos sintéticos, además de utilizarse para hacer crayones, dulces y velas.
Tras dedicarse a la recolección de esta especie por 30 años, Samuel García Galván recibió en febrero de 2014, un taller en planeación estratégica participativa que impartió la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en el que aprendió cómo elevar la competitividad de sus productos e incrementar sus ingresos.
“Me di cuenta que para darle un valor agregado a la candelilla y al orégano necesitaba de más personas de la comunidad. Fue entonces que me organicé con cinco hombres y cuatro mujeres más y creamos una organización formal”, compartió García Galván.
Con el acompañamiento de la Conafor, en julio de 2014 obtuvieron de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) el permiso para el aprovechamiento sustentable de candelilla, el cual les permitió en diciembre de ese mismo año conformar la sociedad Productores Forestales No Maderables del Semidesierto Zacatecano.
Un año y ocho meses después, asistieron a un taller impartido por la Universidad Autónoma de Coahuila sobre el aprovechamiento de especies forestales no maderables, en el que aprendieron a elaborar un nuevo producto: las veladoras.
Para elaborar las veladoras primero recolectan la candelilla y extraen la cera, posteriormente la derriten para agregarle aroma y color. Después se prepara el vaso con el pabilo en medio, se vierte la mezcla y finalmente se deja enfriar.
Tienen en producción veladoras con aroma a rosas, chocolate, coco y canela, las cuales venden en distintas presentaciones con precios que van de 10 a 35 pesos.
Elaboran aproximadamente 60 veladoras al mes y 700 unidades al año. Antes vendían el kilo de cera en 53 pesos.
Sus puntos de venta son el mercado local y estados como Coahuila y Chihuahua. También aprovechan las ferias de productos forestales y eventos nacionales como la Expo Forestal que organiza la Conafor, en la que han participado en 2014 y 2016.
“El producto tuvo mucha aceptación, hicimos pruebas y comprobamos que las veladoras de cera de candelilla duran por lo menos dos veces más que las que están hechas de parafina, además de que el nuestro, es un producto orgánico”, comentó Samuel Garcia.
Su expansión en el mercado de la candelilla les permitió también comercializar el orégano, del cual obtuvieron en enero de 2017 el permiso para su aprovechamiento sustentable por parte de la Semarnat.
En el caso del orégano lo distribuyen molido y la presentación que distribuyen la venden en 20 pesos.
La producción y el aprovechamiento de estas especies forestales no maderables representan una fuente de empleo para los pobladores de estados como Durango, Chihuahua, Tamaulipas, Coahuila y Zacatecas.