La investigación abarcó a 415 estudiantes de la Unidad Académica de Enfermería, se informó
Zacatecas, Zac.- En el marco de la Escuela Internacional de Verano UAZ- SPAUAZ 2022, la docente de la Unidad Académica de Enfermería (UAE) de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Maricruz Vidales Jara, presentó la investigación “Relación entre felicidad y consumo de alcohol y tabaco en estudiantes de Enfermería”, trabajo del que también son parte las docentes Verónica Ortega Gámez, María de la Luz Delgadillo Legaspi y Liliana Calderón Botello.
En su exposición, Vidales Jara en primer término, dio un panorama de cómo el consumo del alcohol involucra aspectos legales, de salud pública, antropológicos y sociales, “factores que tienen altos costos en la salud y la calidad de vida, e incluso, afecta el desarrollo de muchos países”; por otro la felicidad, dijo, “se considera un estado de satisfacción plena que experimentan subjetivamente los individuos en posición de un bien deseado”.
En virtud de ello, la universitaria explicó que el objetivo de esta investigación fue identificar la relación entre la felicidad y el consumo del alcohol y tabaco, y, además, conocer los niveles de felicidad y los patrones de consumo.
“El estudio aplicado a 415 estudiantes se efectuó a través de una cédula de datos personales y de prevalencias de consumo de alcohol y tabaco, junto a la escala de felicidad de Alarcón y por medio de los test Audi (miden los patrones del consumo de alcohol) y el Fagerström (niveles de dependencia de la nicotina)", detalló la docente investigadora de la UAZ.
En ese sentido, subrayó, los resultados que se obtuvieron a partir de los datos como la edad, sexo, semestre y el estado civil, mostraron que a partir de las cinco categorías de la felicidad de Alarcón que son: muy baja, baja, media, alta y muy alta felicidad, la mayor parte de los estudiantes, un 37. 6 por ciento, tienen una media felicidad.
PATRÓN DE CONSUMO
Respecto a los patrones de alcohol en el consumo, “se encontró que el 47.2 por ciento maneja un consumo sensato, sin embargo, es de destacar que en este rubro el 29.9 por ciento está en un consumo dependiente; y el 23.8 por ciento ya presentan un consumo dañino, lo que quiere decir que no han pasado ciertas horas del día cuando ya empezaron a consumir. Sobre el tabaco, según la prueba Fagerström, el 94.5 por ciento presentan no dependencia, y solo el 5.5 por ciento muestran predisposición al cigarro”.
Asimismo, se realizó una correlación de Spearman, y se pudo identificar que la felicidad y el consumo del alcohol se relacionan de manera negativa pero significativa, es decir, los estudiantes tienen una media felicidad y presentan un consumo alto de alcohol, lo que significa que “a menor felicidad es mayor el consumo de alcohol”, puntualizó la investigadora universitaria.
Por otro lado, Maricruz Vidales precisó que, en el consumo sensato, en el dependiente, en el dañino, en la felicidad y cantidad de copas, en la felicidad y consumo de tabaco, en la felicidad y cantidad de cigarrillos, presentan una relación negativa no significativa, lo que quiere decir que “a menor felicidad mayor consumo dependiente”. No obstante, en la felicidad y edad de inicio de consumo de tabaco se encontró que “a menor felicidad, menor edad en el inicio del consumo del tabaco”.
Como conclusión, la docente enfatizó que los resultados arrojaron que “el consumo de alcohol y tabaco están vinculados con elementos psicológicos y de deseabilidad social, por lo que la comprensión de estos permitirá entender la naturaleza del comportamiento adictivo en estudiantes universitarios. Los hallazgos indicaron que se debe tener en cuenta el paso por la vida universitaria de estos jóvenes, ya que genera ansiedad, estrés, depresión, y consumo de alcohol y tabaco”.
