Zacatecas. Gran velada en la Plazuela Miguel Auza con el legendario guitarrista mexicano
Con una brillante e inigualable trayectoria y 57 años de haberle dado una identidad al rock&roll y al blues mexicanos, Javer Bátiz regresó a Zacatecas a presentarse ante un público que le recibió de cálida manera en la Primera Jornada de Blues.
Auspiciada por el Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) Ramón López Velarde, y bajo la iniciativa del exponente de blues local, Luis Díaz Leaños, la primera Jornada de Blues contó con la participación de las agrupaciones Moan Blues, La Estación Blues, The Fart Blues y Doberman de Zacatecas, Fresnillo y Aguascalientes, respectivamente.
Momentos previos al concierto, el legendario guitarrista sostuvo una charla con los medios de comunicación locales con los que remembró de amena manera sus andanzas en la música, su relación con Chuck Berry y Jim Morrison, así como su entrañable vínculo con sus jóvenes alumnos, de entre 16 y 18 años, que ahora conforman su alienación.
El gran ausente de Avándaro, apócope asignado por no haberse presentado en aquel mítico festival de rock, agradeció a los organizadores la invitación manifestando su emoción por volver a Zacatecas después de dos décadas.
“Me da mucho gusto volver a tener a Zacatecas como foro; es una belleza, un paraíso. Se volvió especial, elegante y con un alto nivel”, expresó el músico quien fuera maestro y guía musical de Carlos Santana en la década de los 60.
Gustavo Salinas Iñiguez, director general del IZC, dio la bienvenida al músico manifestándole que para Zacatecas será un honor contar nuevamente con él dentro del marco del 8º Festival Internacional de Jazz y Blues a celebrarse en el mes de julio de 2015.
“Usted es el dueño del rock&roll en México. Es el mago de la música”, dijo Salinas Iñiguez a Javier Bátiz que hizo magia de la noche con una histórica presentación, seduciendo a cientos de sus seguidores zacatecanos.
Ataviado con un gran abrigo blanco, sus lentes ovales y su cabello en guerra, El Brujo enfatizó que “la cultura sacará adelante al país”, añadiendo que además de ser un guía en la guitarra y en la música pretende propiciar que el entorno de sus más cercanos sea afable con la intención de lograr lazos de creación y comunicación.
Manifestando que “las buenas costumbres son como la buena música”, el dueño de una trayectoria colmada de esfuerzo, dedicación y entrega, conjuró ritmos y géneros que conforman y nutren al blues, creando una experiencia introspectiva para regalarla a los asistentes de manera intensa y única con sus temas más reconocidos así como los que conforman su más reciente álbum.
La Plazuela Miguel Auza de la capital fue el escenario donde el legendario guitarrista inauguró las actividades artísticas que el IZC realizará de manera mensual en espacios públicos de la ciudad con el objetivo de ofrecer espectáculos de calidad y llenarla de más vitalidad.