En la capital del país se presentó el libro alusivo a la importancia del recinto en la vida cultural
MÉXICO, DF. Al Palacio de Bellas Artes lo han hecho suyo varias generaciones y a ellas este recinto las ha modificado como sociedad con importantes representaciones artísticas, actividades culturales y como escenario de momentos historicos de nuestro país, expresó la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, durante la presentación del libroPalacio de Bellas Artes. Las obras y los días 1934-2014, publicado como parte de los festejos por el 80 aniversario del recinto de mármol.
La titular del INBA dijo, en el acto realizado en la Sala Manuel M. Ponce, que el Palacio “tuvo un largo y complejo proceso de cristalización, desde su proyecto hasta que abrió sus puertas. Eso mismo lo hizo enriquecerse con el trabajo de los arquitectos y artistas que trabajaron en él, entre ellos los italianos Adamo Boari y Leonardo Bistolfi, el húngaro Géza Maróti y los mexicanos Federico Mariscal, Alberto J. Pani y tantos más”.
El volumenPalacio de Bellas Artes. Las obras y los días 1934-2014 está integrado por una selección de imágenes captadas por el fotógrafo arquitectónico Massimo Listri y publicado en colaboración con el célebre editor Franco Maria Ricci. Incluye los textos Del Teatro Nacional al Palacio de Bellas Ates 1904-1914 de Xavier Guzmán Urbiola, Los días. Crónica de 80 años 1934-2014 de Alejandro Rosas y Guía de forasteros de Giorgio Antei.
Juan Meliá, coordinador nacional de Teatro del INBA, resaltó que el libro nos acerca, con visiones diferentes, al antes, al durante y al hoy; al porqué y al cómo del Palacio de Bellas Artes: “Nos confronta con el edificio, hasta llegar a referir la memoria de este teatro, espacio, museo, monumento e institución”.
Las imágenes incluidas en el libro, agregó, “nos dan la visión de lo invisible, nos ofrecen el detalle preciso y preciosista. Los autores le han sumado historias que nos dejan entrar a los intereses creativos o discursos conceptuales del proyecto arquitectónico, de lo político a lo artístico, de lo anecdótico a los entornos históricos”.
El director escénico Mario Espinosa destacó que no todo está dicho sobre el Palacio de Bellas Artes: “Es importante aportar un punto de vista contemporáneo de un suceso que ha marcado un hito en la historia de nuestra cultura, porque cada época tiene la responsabilidad de comprometer a su forma y mirar los hechos del pasado que alimentan su presente y proyectan su futuro”.
Por su parte, Alejandro Rosas rememoró algunos de los acontecimientos que han marcado la historia del Palacio desde su escenario, y a partir de ello llamó a continuar con las investigaciones que liguen al recinto con la vida social de los mexicanos, “pues su uso refleja las tendencias de cada época”.
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