Los autores Sigifredo Esquivel Marín y Caleb Olvera Romero reflexionaron sobre la compleja relación entre la filosofía y la literatura, pero es mucho más profunda de lo que parece a primera vista, señalaron
No hay filosofía sin forma literaria y no hay escritura que no implique de una o de otra forma, un estilo de pensamiento. Así se expresó en la presentación del libro titulado “Hermenéutica de la (auto)creación. Diálogos entre filosofía, literatura y psicoanálisis”, producto del trabajo colegiado de los Cuerpos Académicos UAZ-CA-244, Hermenéutica filosófica y UAZ-CA-150, Cultura, Currículum y procesos institucionales, por los autores Sigifredo Esquivel Marín y Caleb Olvera Romero.
“En esta obra, como su título lo señala, el estilo de escritura y estilo de pensamiento resultan indisociables, se refractan, se complementan, se rechazan, pero nunca permanecen ni ajenos ni estáticos en relación con el otro. Además, la filosofía es fundamental, pues es una interrogación infinita sobre el hombre y el mundo, sobre el hombre en y ante el mundo”, resaltaron los autores.
Agregaron que la literatura es una forma de expresión, exploración y experimentación de la condición humana, de sus emociones y su universo, a través de la belleza y de un estilo único. Por su parte el psicoanálisis constituye una de las indagaciones más radicales de la condición humana y sus laberintos. Tanto el pensamiento, el arte y el psicoanálisis son vías fundamentales para el autoconocimiento, debido a su proximidad con la esencia humana, pues estamos hechos de palabras.
La obra está estructurada en tres capítulos fundamentales: “Entre literatura y filosofía”, “Literatura, ruta mística y diseño de sí” y “Literatura, psicoanálisis y existencia narrativa”. Los autores reflexionaron sobre la compleja relación entre la filosofía y la literatura, señalando que esta es mucho más profunda de lo que parece a primera vista. Mientras que la filosofía persigue la verdad a través de la argumentación, la literatura busca la verosimilitud mediante la ficción.
Finalmente, los investigadores Esquivel Marín y Olvera Romero, exponen en su obra la relación original entre el psicoanálisis, la literatura, la religión y el mito, y cómo esto presupone un nuevo fundamento antropológico narrativo. Además de mostrar algunas de las relaciones, y la posibilidad de cambiar lo humano si se cambian las premisas fundamentales de la narrativa.
En este sentido, los autores concluyeron con la reflexión de que “el psicoanálisis, como cualquier ciencia singular, se nutre del ‘fruto prohibido’ del conocimiento y, en su afán por saber, justifica cualquier acción. La literatura, en cambio, es mucho más antigua y quizás, podríamos decir, más sabia, pues ha preferido no liberar por completo a esos que aparentemente contiene la botella. Tanto la literatura como el psicoanálisis son formas privilegiadas de recrear la finitud humana”.