Zacatecas. El secretario de Economía clausuró el curso en el que participaron 108 infantes
Adolfo Bonilla Gómez, titular de la Secretaría de Economía (Sezac), clausuró el curso Business Kids en el que participaron 108 niños y niñas con el objetivo de impulsar el emprendedurismo y la realización de negocios desde temprana edad.
El funcionario recorrió los 70 proyectos que elaboraron los infantes y reconoció la importancia de educar y promover la creación de empresas desde la niñez.
Los padres de familia pudieron consumir los productos elaborados por los pequeños que iban desde pasteles y aguas frescas, hasta una mano robótica y adiestramiento de animales.
CONTEXTO
A escala nacional, la idea de BusinessKids, desarrollo emprendedor para niños, nace en 2011 y se consolida en verano de 2012 como un curso de verano para infantes interesados en aprender a hacer negocios.
La empresa que impulsa esta actividad, en su página digital, señala que después de varios años de trabajar con emprendedores, pudimos constatar que el 90% de los adultos que vivieron en el marco de una familia no emprendedora, se paralizan a la hora de poner un negocio, independientemente de lo viable que pueda ser su idea, y que más del 80% de los emprendedores que siguen sus proyectos a largo plazo, vienen de una cultura emprendedora, es decir, de familias en las que el padre, la madre, ambos o algún familiar fueron emprendedores.
A través de diferentes dinámicas, es posible vencer el miedo a emprender, sin embargo el modelo educativo en una cierta etapa de la vida tiene un gran peso para formar emprendedores.
Basándonos en estas experiencias, descubrimos que la falta de emprendedores del país está en el modelo educativo que fomenta el empleo sobre el autoempleo. No se enseña a los niños las herramientas necesarias para convertirse en emprendedores, tales como la a autoconfianza, la autoestima, las habilidades de liderazgo y de ventas, la creatividad, la educación financiera y el servicio al cliente, tanto interno como externo, entre tantas otras.
La respuesta está en los niños, enseñarles a ellos a emprender es sembrar la semilla que genera a largo plazo empresarios honestos y comprometidos con el desarrollo social del país.
El proceso de adaptar las clases para adultos a un lenguaje y a dinámicas aptas para los niños tardó varios meses.