“Crisis Epocal del Capitalismo, Tiempos de Peligro y Alternativas en el Siglo XXI”
Zacatecas, Zac.- Inició ayer el seminario internacional “Crisis Epocal del Capitalismo, Tiempos de Peligro y Alternativas en el Siglo XXI”, un homenaje de la Universidad Autónoma de Zacatecas al desaparecido académico e investigador mexicano Luis Arizmendi, a quien se considera en las ciencias sociales “un pensador revolucionario ante la devastación y la barbarie”.
El acto inaugural de este seminario internacional –que se desarrolla de forma híbrida, bajo la modalidad presencial y virtual-, se realizó desde la sala de juntas de la rectoría de la UAZ, en un acto encabezado por el rector Rubén Ibarra Reyes, quien estuvo acompañado por José Luis Hernández Suárez, director de la Unidad Académica de Ciencias Sociales.
También estuvieron presentes la mayor parte de los docentes - investigadores del cuerpo académico de Población y Desarrollo de nuestra universidad, encabezados por Rubén Ibarra Escobedo, uno de sus fundadores y quien fuera cercano amigo del homenajeado Luis Arizmendi.
PLANOS EXISTENCIALES
En su discurso inaugural, transmitido vía zoom, el rector Rubén Ibarra Reyes, señaló, que, para hablar de Luis Arizmendi, “hay que remitirse a distintos planos existenciales, todos con la complejidad y con esa camaradería tan característica de nuestro querido amigo”, así como con “una nostalgia permanente que se desprende de rememorar que perdimos al hombre”.
Sin embargo, acotó el rector de la UAZ, es trascendental saber que, en nuestra máxima casa de estudios, antes de la muerte de Luis Arizmendi –quien trágicamente murió de Covid-19-, con la publicación de algunos de sus libros, “inmortalizamos la obra de uno de los últimos representantes del pensamiento crítico de las ciencias sociales mexicanas y latinoamericanas”.
Con nostalgia, Rubén Ibarra Reyes confesó que, tras su muerte “no puedo evitar evocar que donde quiera que esté, estoy seguro, de que estará departiendo con Bolívar Echeverría (de quien se consideró, Arizmendi fue uno de sus principales alumnos), Jorge Bernstein, con Walter Benjamin, o dilucidando con Max Horkheimer sobre la Segunda Guerra Mundial, o incluso hasta con el mismo Marx, sobre la vorágine que simboliza el capitalismo en la vida humana”.
UNA VASTA OBRA
“Sin duda, la vasta obra de Luis, entre libros, artículos, ensayos, capítulos, tesis, entrevistas y documentales darán para no cesar de analizar y replantear al capitalismo de una manera a temporal, y más aún, mantendrá abierto el horizonte para las nuevas generaciones de estudiantes de todas las disciplinas, que integran a las ciencias sociales para introducirse en su obra”.
Asimismo, el rector de la UAZ señaló que, si algo distinguió a la obra de Luis Arizmendi, fue ese bagaje multidisciplinar y no ecléctico que abordó, desde el pensamiento crítico, “porque, así como la humanidad es tan distinta, tan compleja, también se amerita una obra a nivel de los distintos contextos en los que los seres humanos se desenvuelven en las sociedades que forman, y en ello, sin alguna duda, la producción de Luis fue más que apta”.
“Extrañaremos al hombre, al colega, al compañero y al incansable pensador, pero este día estoy seguro de que se consolida la trascendencia de uno de los máximos exponentes de las Ciencias Sociales del siglo XXI”, finalizó Ibarra Reyes.
Enseguida, intervino en el acto inaugural Rubén Ibarra Escobedo, ex docente investigador de la unidad académica de Ciencias Sociales, quien tuvo la oportunidad de mantener con Luis Arizmendi, además de una estrecha relación académica, una relación de amigo, a quien siempre admiró.
PERMANECE SU PENSAMIENTO
“Los universitarios de Ciencias Sociales, desde Zacatecas, desde México y Latinoamérica, sus amigos, aquellos a los que motivó con sus ideas tantas veces, los que tuvimos la oportunidad de conocerle; a través de este evento, queremos mostrar que la desaparición física de Luis no representa el fin de su pensamiento”.
Porque explicó Ibarra Escobedo, “como todos los pensadores sociales que desentrañan tan certeramente el sin sentido del capitalismo, como él lo hace, están destinados a perdurar, porque el objeto de su puntual crítica se mantiene”.
Enseguida explicó el investigador – docente: “el sin sentido con que el capitalismo enfrenta las múltiples amenazas a la vida, que el propio sistema ha provocado, no encuentran prevención o contención; por el contrario, lo que se impulsa es el colapso, mediante la guerra, con violencia político- destructiva”, como ocurre en el mundo actualmente.
PODER PLANETARIO
“En tal contexto la humanidad padece un proyecto catastrófico mientras el capitalismo apuntala su poder planetario. El Estado de excepción fortalecido en la fase post- Covid 19 implicará, nos advertiría Luis, a la fase de mayor peligro planetario, a adentramos en el capitalismo necropolítico, el capitalismo de muerte”.
Actualmente, reflexionó Rubén Ibarra Escobedo, hay en el mundo un grupo de líderes autoritarios y misóginos, que, con su desprecio a los derechos humanos universales y su miedo a la libertad y a la democracia, están destrozando cualquier esperanza de humanidad.
“Luis era consciente de todo esto, pero no estaba vencido por el pesimismo, siempre creyó en la resistencia de los pueblos, particularmente los pueblos de Nuestra América... estaba convencido de la edificación de Estados contra hegemónicos... su corazón y su mente alentaban el germen de un nuevo mundo”.
Intervinieron además en el evento inaugural de este seminario internacional la docente investigadora del Instituto Politécnico Nacional, Vianey Ramírez Siles –quien fuera compañera de Luis Arizmendi-, y Julio Boltvinik, investigador del Colegio de México. Además, se transmitió un video con fotografías del homenajeado, con una breve semblanza de su trayectoria.