*La televisión se mantiene en primer lugar, pero en los últimos 3 años perdió en la entidad 5% de audiencia: Sergio Octavio Contreras

*Odio, principal sentimiento que se expande en las redes sociales

ANGEL AMADOR SANCHEZ

El periodismo vive un gran problema a escala nacional y en el caso de Zacatecas es más profundo, porque no ha habido una transición real de los medios tradicionales hacia lo que se llama los nuevos medios.

Todo se ha quedado en una conversión hacia la digitalización con los mismos contenidos, afirma y cuestiona Sergio Octavio Contreras.

El comunicólogo y experto en el análisis de redes sociales, es categórico: “lo que vemos es la reproducción de los mismos contenidos de viejos medios en nuevos medios”.

De acuerdo a sus investigaciones, en México y el estado una gran cantidad de personas están migrando a los nuevos medios y, sobre todo, al uso de redes sociales.

Así, agrega, en Zacatecas el uso de Internet ya rebasó al número de radioescuchas y a los lectores de periódicos impresos. La televisión sigue en primer lugar, en segundo la red, luego la radio y hasta el últimos los periódicos.

De esta manera, casi 40% de las personas que viven en la zona conurbada de Guadalupe-Zacatecas se informa a través de la red y 6% por los periódicos tradicionales.

Entrevistado en el programa Los periodistas (Radio Zacatecas 97.9 FM), Sergio Octavio Contreras destaca que hoy en día el cibernauta busca ya sus propios contenidos, tiene esa libertad en la red, de la que carece el lector del periódico impreso. La red es utilizada por los usuarios para sus propios fines, subraya.

El investigador expresa que el problema radica en que los medios tradicionales no han ofrecido contenidos nuevos ni variados, ni tampoco han permitido que los cibernautas tengan una retroalimentación de sus propios contenidos; los usuarios de la red se van y más tratándose de las nuevas generaciones.

Revela que en Zacatecas, además, en los últimos tres años la televisión ha perdido 5% de audiencia, la cual migró a Internet. “Hablamos principalmente de jóvenes, quienes buscan sus lecturas y construyen sus contenidos".

Sin embargo, considera que el periodismo tiene aún las herramientas para generar información profesional, algo que no tienen varias páginas digitales o espacios construidos en Facebook, los cuales carecen de rigor, no sólo en la forma de escribir sino en la comprobación de lo que se redacta.

“En muchas páginas digitales no hay rigor ni comprobación de hechos, es un riesgo en las redes, en las que se escribe una gran cantidad de mentiras y mitos”, alerta.

Y advierte: si el cibernauta no tiene la capacidad para comprobar la información, pues dará como verdad a las mentiras, y lo peor es que éstas se quedan en el imaginario colectivo.

Puso de ejemplo el reciente caso que se divulgó en Internet sobre la “desaparición” de un autobús de pasajeros en territorio zacatecano, en el que viajaban 30 personas. El hecho nunca se comprobó, fue desmentido por la empresa, por el procurador de Justicia, Arturo Nahle, y hasta por el gobernador Miguel Alonso Reyes.

No obstante, en las redes se concluyó que las “autoridades ocultan la información”.

CAMBIOS RADICALES CON LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS

Sergio Octavio Contreras es licenciado en Comunicación por la Universidad Autónoma de Aguascalientes, con estudios de posgrado por la Universidad Autónoma de Durango y master en Sociedad de la Información por la Universidad Oberta de Cataluña.

A la fecha es responsable del área de capacitación en la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública (CEAIP) y autor del libro Zacatecas y la Sociedad Internet.

Para el especialista, las nuevas tecnologías están transformando vidas, aunque los usuarios no se den cuenta. Son cambios radicales, profundos.

A pregunta expresa, refiere que un estudio reciente, elaborado por tres investigadores de la Universidad de Shanghai, quienes analizaron alrededor de 70 mil perfiles de Facebook, descubrieron que el contenido de los mensajes conlleva por lo general una carga positiva o negativa del individuo, pero esta carga se expande conforme a la predisposición de otras personas.

“Al parecer de acuerdo a estos resultados, en realidad los sentimientos de odio, relacionados con ataques verbales, insultos, mofas, es decir, con una violencia simbólica que se genera en las redes, pareciera ser que el odio es el sentimiento que más se expande que otros, que podrían ser la alegría o la solidaridad”.

Esto es muy visible en todas las culturas y México no es la excepción, ya que la red se convierte en muchas ocasiones en ring virtual de agresiones entre cibernautas, sobre todo en cuestiones políticas, en las que participan otros y no precisamente los actores centrales.

Incluso, puntualiza Contreras en Los periodistas, en las pasadas elecciones locales para renovar alcaldías y la Cámara de Diputados, las redes sociales fueron un escenario cruento de ataques, chismes y mofas contra los candidatos, y enfrentamientos entre éstos e integrantes de partidos, lo que de manera alguna abona al diálogo y sólo enturbia los sentimientos que hay en las redes.

“Las redes son un escaparate de lo que las personas piensan; en Zacatecas la mayoría de los cibernautas usan Internet con fines familiares, buscan información e informarse, y sólo el 1 por ciento, por ejemplo, lo utiliza con fines pornográficos”.

Internet es el abanico de una gran cantidad de perspectivas y formas de ver la vida de los usuarios; entonces, se puede encontrar un grupo específico, o distintos grupos interesados en la política, pero a otros les interesan temas distintos, añade.

En la red caben todos, es heterogéneo, es decir, cada individuo parece que se identifica con otros y empiezan a formar grupos en Facebook o Twitter.

El entrevistado indica que una gran cantidad de contenidos que se comparten en las redes se vinculan con el espectáculo, el ocio y con lo efímero. Sin embargo, hay otro grupo que es más racional y que aporta juicios y análisis.

“Es muy difícil sujetar a la red porque en realidad representa extensiones de lo que todas las personas piensan. Internet es una manifestación que va más allá de un medio de comunicación”.

NO, A CUALQUIER INTENTO DE CONTROL

Sergio Octavio Contreras, autor de más de 200 artículos sobre comunicación, señala tajante que “la red no debe ser regulada, ¡jamás!, por ningún gobierno ni poder económico”, intención que tratan de concretar algunos gobiernos, incluido el mexicano, bajo distintos argumentos. Autoridades de regímenes autoritarios, por desgracia, si han logrado coartar esta libertad, critica.

Enfatiza que lo interesante es que Internet no tiene padre ni madre, no es propiedad de la iniciativa privada ni de ningún gobierno, por lo tanto a los sistemas políticos y económicos les ha resultado muy complejo controlarla.

Y establece: “Internet, con todos los problemas y limitantes que tiene, es el principal medio de libertad que existe para el ser humano, y mientras no llegue otra tecnología que la sustituya, como usuarios de la red debemos defenderla”.

Si bien es cierto que se cometen abusos, robo de identidad, por ejemplo, distribución de pornografía infantil, ventas de armas, drogas, prostitución, también es cierto que la red permite otros desarrollos, relacionados con la educación, la ciencia y la tecnología. No todo es negativo, remarca el comunicólogo.

Exhorta “a situarnos como cibernautas críticos de la red; tampoco hay que verla como la solución de los problemas, pero no es verdad que la red los genera. Los usuarios fomentan la perversión de la red y no la tecnología por sí misma”.

Dice que las nuevas tecnologías deben estar muy relacionadas con la educación y también con la formación de la familia.

“En Finlandia, donde México ha visto un modelo educativo a seguir, en realidad han transitado, primero, a partir de cambios internos en las familias y en las personas, pero si no logramos ese cambio interno en los individuos, todos los problemas que tenemos, incluidos los sicológicos, los vamos a trasladar a la red”, finaliza.