En acto simbólico se unen familias y víctimas de violencia
ANGÉLICA JOCELYN SOTO ESPINOSA
Cimacnoticias
MÉXICO, DF. Como un símbolo de protesta por los pendientes que el gobierno federal dejó al cierre de 2014 en el tema de desapariciones de personas y feminicidio, la organización civil Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) encendió un árbol navideño en el Centro de esta capital con las fotos de los 43 estudiantes agredidos y desaparecidos en Iguala, Guerrero.
La tarde de ayer, CDD –junto con otras organizaciones civiles y religiosas– se dio cita en el Hemiciclo a Juárez para encender un árbol navideño de cuyas ramas cuelgan las 43 imágenes de los estudiantes normalistas desaparecidos, y en su punta fue colocada una estrella con la palabra “Justicia”.
Aidé García Hernández, coordinadora de Relaciones Interinstitucionales de CDD, dijo a Cimacnoticias que es muy importante que en estas fiestas decembrinas se haga un reclamo de justicia, ya que el gobierno federal ha sido “muy insensible” con las familias de personas desaparecidas.
Agregó que la organización apoya a las familias de Ayotzinapa –donde se ubica la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”–, que en estas fechas continúan sus movilizaciones por la aparición con vida de sus hijos.
Advirtió que al igual que los familiares, CDD cuestiona el actuar de las autoridades federales en el tema. “Si no se respetan los Derechos Humanos en este país es como si no existiera el gobierno”, subrayó.
La activista lamentó que en esta temporada las familias de Ayotzinapa no tengan noticias sobre sus hijos, y enfatizó que la situación de violencia que enfrenta actualmente la sociedad mexicana es “alarmante”, ya que todos los días desaparecen mujeres jóvenes y adolescentes, sobre todo en el Estado de México.
“Queremos que este acto simbólico, de fe, ecuménico, de esperanza, también sea por todas y todos los que sufrieron violencia, desaparición forzada y asesinatos este año”, dijo García Hernández, quien confió en que para 2015 haya justicia, ya que ellas seguirán luchando y demandando que termine la impunidad.
Alrededor del árbol, decenas de personas encendieron una veladora en símbolo de esperanza porque las madres y padres de los estudiantes desaparecidos tengan información certera sobre el paradero de sus hijos.
Con oraciones y súplicas, las y los presentes (activistas y familias enteras) mostraron que la sociedad civil está cobijando a las familias de las –recordó la integrante de CDD– más de 20 mil personas desaparecidas y de más de 10 mil migrantes perdidos en México.
La actriz Julieta Egurrola pasó lista a cada uno de los nombres de los estudiantes desaparecidos, y la escritora Elena Poniatowska mandó vía telefónica un mensaje a la sociedad mexicana para que no se olvide de la tragedia que culminó en la desaparición de 43 normalistas guerrerenses.
Al finalizar el evento, parejas y familias lanzaron pequeños globos de cantoya de color blanco en señal de esperanza.
Las integrantes de CDD pidieron a las autoridades capitalinas que conserven el árbol hasta el 31 de diciembre; sin embargo, dos horas después de concluido el acto simbólico, policías del DF cuestionaron a las activistas y les advirtieron que el árbol podría ser vandalizado e iniciaron rondas de vigilancia en la zona.