Años después, mujeres scouts reconocen que fueron víctimas de abuso y acoso sexual, que los tocamientos no eran parte del «juego»
Diana Juárez e Itzel UC/ Especiales LSR
SemMéxico/La Cadera de Eva.
Ciudad de México.- Después de algunos años, mujeres scouts identificaron que los tocamientos, abusos y acoso por parte de sus compañeros y líderes de manada, que habían normalizado, no eran parte de los juegos o dinámicas sino comportamientos inadecuados. Se dieron cuenta de ellos hasta que llegaron al feminismo u otras mujeres les hicieron ver que fueron agredidas, reporta La Cadera de Eva.
«Primero se vuelven tus amigos, tratan de ganarse tu confianza para que te sientas cómoda. Se podría decir que cuando cometen el abuso, lo quieren disfrazar de algo que sucedió entre compas, es de amigos, cotorreo», dice para La Cadera de Eva una joven que fue scout.
«Los juegos de contacto se prestan muchísimo. Me tocó en una ocasión que estábamos todos en un círculo agarrados de la cintura de frente, para adelante y para atrás, hasta que sentí que me tocaron, debajo de la falda, fue un menor de edad. Todos se empezaron a reír, el niño y su jefe, ya no dije nada porque vi que a los demás les pareció chistoso y normalizaron la situación», dice otra de las scouts, quien considera que el dejar pasar este tipo de actitudes va formando «machitos«.
El entorno Scout nos remonta a un ambiente de aventura y diversión, más no de abuso y acoso. De acuerdo con la información de la página web de la Asociación de Scouts de México, A.C. (ASMAC), la misión de dicha agrupación es «contribuir a la educación de los jóvenes, mediante un sistema de valores basado en la Promesa y la Ley Scout, para ayudar a construir un mundo mejor donde las personas se sientan realizadas como individuos y jueguen un papel constructivo en la sociedad».
En su misma página tienen acceso a la Política Nacional de Seguridad y Protección Juvenil donde establecen un código de conducta, y hacen una descripción sobre lo que es el abuso y la violencia agrupada en cuatro tipos (emocional, física, sexual o trato negligente. La Asociación señala que parte de la prevención es que los padres hablen sobre el abuso con sus hijos porque así «más fácilmente» podrían defenderse de los ataques.
«Es un ambiente tan familiar, que no te imaginas que pueda pasar esto. Sin embargo, pasa y se ha normalizado y no está bien…», dice en entrevista para La Cadera de Eva otra joven que fue scout, quien junto otras dos crearon el Clan Violeta, un colectivo feminista que las unió. No eran amigas, pero tenían algo en común, sus historias, todas fueron abusadas y se dieron cuenta hasta después.
Hasta el momento, Clan Violeta tiene registradas 155 denuncias de niñas y mujeres que fueron o son scouts. La mayoría de ellas son de la Ciudad de México, donde se tienen registradas 41, después está Querétaro con 49, en Jalisco se reportaron nueve, Michoacán ocho, seguido Guanajuato con siete, el mismo número prefirió no decir el lugar; en San Luis Potosí y Zacatecas se reportaron seis; Morelos y Toluca cinco; Durango, Puebla, Sonora y Veracruz cuatro, Chihuahua, Coahuila, Hidalgo, Quintana Roo y Tamaulipas registraron tres y el resto de los estados, que son Baja California, Oaxaca, Tabasco y Yucatán una.
Del total de las denuncias, 70 fueron por acoso sexual, 34 por abuso sexual, 13 violaciones, 13 coacción sexual (entiendo como presión emocional para forzar a una actividad sexual), siete denunciaron acoso y abuso sexual, cuatro denuncias por violencia digital (exhibieron fotografías de ellas en redes sociales), dos reportaron violencia física, dos menores denunciaron que fueron testigos de violaciones y hubo una denuncia de las siguientes categorías: violencia de género, perversión infantil, hostigamiento por ser feminista, forzada a tomar alcohol, discriminación por preferencia sexual y amenazas de secuestro.
El sábado 19 de septiembre, el Clan Violeta llevó a cabo un tendedero de denuncias, a partir de la visibilización de los casos, la ASMAC emitió un comunicado en el que expresó su preocupación sobre los casos presentados y anunciaron que no serán tolerantes con ningún acto de abuso, violencia o discriminación hacia las mujeres y ningún miembro de la organización; posteriormente el clan violeta emitió un pliego petitorio que fue recibido por la misma Asociación e invitó a un diálogo al Clan.
Se buscó a la Asociación de Scouts de México, por el momento, señaló que su postura es la publicada en redes y espera reunirse con el Clan Violeta para darle seguimiento a los casos.
El feminismo les ayudó a alzar la voz
Clan Violenta tiene una historia, se ha conformado por varias mujeres que han pasado por las mismas situaciones y que, cuando crecieron o se informaron sobre violencia de género, se dieron cuenta de que aquellos juegos estaban mal.
«El periodo actual te ayuda a darte cuenta y desalienarte, creemos que nos hemos unido a raíz de este tema, la sororidad, aunque no éramos tan cercanas, teníamos ese factor en común, habíamos sido abusadas», dice Sandra.
Como niña no sabes lo que pasa
Las scouts hicieron énfasis en que el acoso está tan normalizado y que, como ellas en su infancia, las niñas no saben que lo que les está pasando está mal. «No es algo que se hable, no les dice porque un hombre o niño no tiene que tocarte en cierta partes», dice una de las scouts.
Además, las integrantes de Clan Violeta aseguraron que la revictimización dentro de las agrupaciones es una constante, incluso, en casos de menores, «nos hacen sentir culpables de lo que nos pasa, hay muchos casos, a las niñas pequeñas se les revictimiza por la manera en que caminan, les dicen que andaban provocando».
Las entrevistadas comentaron que los juegos de contacto en grupos mixtos se prestan para abusos físicos, los varones usan su fuerza de una forma excesiva con sus compañeras, y también llegan a tocar sus partes íntimas. «No se sabe si te tocaron sin querer o te tocaran a propósito y son actitudes que los demás replican», señala una de ellas.
Este tipo de actitudes se encuentra tan normalizada que se toma como un chiste. Una de las scouts contó que durante un juego en un círculo agarrados de la cintura sintió que la tocaron: «Me tocó en la pompa, no lo suficiente, todos se empezaron a reír, empezaron a decir que era muy chistoso, es como si todo el mundo lo dejara pasar».
En el tendedero de denuncias que las scouts feministas realizaron el pasado 19 de septiembre, se colgó una denuncia parecida:
«Fue en los foros nacionales hace años y yo estaba en tropa, estábamos jugando un juego […] un chico 2 años mayor que yo metió su mano en mi entrepierna, bajo mi falda, por mucho tiempo no entendí lo que sucedió». Jalisco, Grupo 26 Tropa.
«Cae la noche y los compañeros intentan meterte la mano»
Las scouts comentaron que en los campamentos aumenta la posibilidad de sufrir abuso sexual, los testimonios respaldan la afirmación, en el tendedero se colgó esta denuncia:
«Querétaro, Clan grupo 7. Estábamos en un campamento en la casa de campaña dormidos, comencé a sentir que alguien me tocaba y besaba el cuello y el cuerpo, lo pellizque y golpee. A la mañana siguiente lo comenté y me dijeron mentirosa, nunca nadie me creyó».
Las críticas a los cuerpos femeninos también se encuentran presentes dentro de la convivencia scout, comentarios como: «´Ya viste cómo corre, se le mueve todo´, llegan a incomodarnos», declara una de ellas.
Tras escuchar comentarios como este, las integrantes de Clan Violeta se han cuestionado la perspectiva que sus compañeros tienen de ellas. «Si así ve a otras chavas, de qué manera me verá a mí, lo hacían de forma normal como si no nos ofendiera», acusa.
Scouts México opera sin perspectiva de género
Los Scouts de México tienen su origen desde 1912 y fueron reconocidos por la IV Conferencia Internacional Scout en 1916. En 1943 se organizó la Asociación Civil, con el nombre Asociación de Scouts de México A.C. y fue hasta 1981 cuando ingresaron unidades femeninas a la asociación.
A casi cuatro décadas del ingreso de mujeres a los Scouts de México, no existe un protocolo de denuncias y atención de violencia de género eficaz. La plataforma CONECTA, según la página oficial de Scouts México, es una herramienta para la atención oportuna de comportamientos indeseados en cualquier ámbito relacionado con las actividades de la institución, así como cualquier conducta hostil basada en género.
Sin embargo, las entrevistadas que han realizado denuncias a través de esta plataforma, aseguran que esta herramienta promueve la revictimización de las jóvenes que han sufrido violencia; al inicio hay un formulario básico que cuestiona a las chicas sobre si verdaderamente quieren hacer la denuncia.
«Está creada sin visión de género, no está bien pensada y bien analizada, trabajas sin filtros», dice una de las scout.
«En lugar de proteger a las víctimas, sólo las vulnera más, te dicen ´ya le avisamos a tu agresor´. Al no existir la posibilidad de denunciar anónimamente, las chicas son expuestas al señalamiento público. Te dicen que tú eres la puta, la zorra, la que miente, la que se hace la víctima», señala una de las denunciantes.
La plataforma pide nombre, correo para contactar a la víctima con su agresor y piden pruebas que, en contextos como los que se dan las agresiones, son difíciles de conseguir.
«Necesitan que llegues golpeada y violada para que tenga valor tu palabra», comparte una de las scouts.
Una exintegrante scout cuenta que fue complicada la situación cuando decidió hacer su denuncia: «Yo he estado en ese grupo desde que era pequeñita y tenía 10 años, ahora tengo 25, mi denuncia la hice este año y me encuentro con que el jefe de grupo que conozco desde pequeña, ni siquiera me llamó para saber cómo estaba después de mi denuncia, él estaba muy preocupado por cómo estaba su amigo que era mi agresor».
Si pasa en la ciudad pasa en todo el país
En México existen más de 700 grupos scouts, están presentes en más de 200 países y territorios. Actualmente existen más de 30 millones de miembros, de los cuales 7 millones son adultos voluntarios.
Las integrantes de Clan Violeta mostraron preocupación por lo que sucede en las provincias, ya que, si existen tantas denuncias provenientes la Ciudad de México, los abusos contra niñas y adolescentes en entornos Scout también pueden presentarse en todo el país.
Además, según lo que contaron, en los grupos de provincia el seguimiento a las denuncias no se lleva a cabo de la mejor manera. «Las provincias no están bien organizadas, las denuncias no pasan de los grupos y en los grupos silencian a las víctimas…».
Clan Violeta envió su pliego petitorio a la Asociación de Scouts de México donde se les pide capacitación y certificación a nivel institucional en materia de perspectiva de género, revisar el discurso revictimizante del programa CONECTA, reformular el protocolo para el ingreso a los scouts, ofrecer acompañamiento psicológico a las mujeres violentadas y crear una campaña anual de prevención y denuncia de violencia de género.
Por el momento, está pendiente una reunión entre la Asociación de Scouts y el Clan Violenta donde se revisarán todos estos puntos para garantizar una experiencia libre de violencia para todas las niñas y niños que tengan el deseo de convertirse en un scout y puedan portar su uniforme sin correr ni un peligro.
(Información publicada en La Cadera de Eva)