Historia de una joven obligada a ser valiente
SOPHIA D ´VERDI
SemMexico. “Son unos cobardes. Ellos saben qué pasó esa noche y lo niegan”, responde de Daphne Fernández a Rocío Acosta de Rodríguez, madre de Gerardo Rodríguez, uno de sus agresores, el que se quedó mirando, el que no la defendió.
“¿Por qué no hizo nada cuando comencé a llorar y a decirle a Diego (Cruz Alonso) y a Jorge (Cotaita) que dejaran de hacerme lo que hacían?
“¿Por qué no se dignó a decirle a Jorge “oye regrésale su teléfono” después de literalmente SUPLICAR que me lo dieran?, ¿Que le costaba decir “déjenla”?”, escribe Daphne Fernández en una carta dirigida a la madre de Gerardo, quien mandó una carta a los medios de comunicación la semana pasada acusándolos de haber hecho un linchamiento mediático en contra de su hijo que lo ha marcado de por vida.
“¿Por qué no me ayudó?”, respondió Daphne en su cuenta de Facebook a la madre de Gerardo.
“Soy la niña que ha sido atacada por cuatro familias y que ya se HARTÓ”, publicó el 15 de abril, tras leer la carta de la mamá de Gerardo.
“Dices que tu hijo quedó “marcado de por vida” y que tendrá que vivir con ese “estigma” ¿Y yo qué? Ahí es donde me das lástima Rocío, porque me queda claro que aún no puedes ver, no logras comprender que esto se pudo haber evitado si hubieran sido justos, si hubiesen jugado limpio, si no hubiesen inventado tantas porquerías.
“Hasta el día de hoy te pregunto ¿Qué has ganado? ¿Por qué sigues mintiendo? ¿Con qué fin? Porque si es con el fin de salvar a tu hijo, eso sólo lo podrías intentar socialmente porque en la memoria de tu hijo siempre va a estar lo que sucedió esa noche”, recrimina Daphne.
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Esa noche, enero del 2015, Daphne Fernández, salía de la discoteca PH en Boca del Río, y de acuerdo con los informes policiales, la subieron por la fuerza al interior de un Mercedes Benz, le quitaron el celular y la llevaron al domicilio de uno de ellos donde fue violada en el baño.
Los cuatro jóvenes, llamados por los medios de comunicación como Los Porkys, Enrique Capitaine -hijo del exalcalde de Nautla, Felipe Capitaine-, Jorge Cotaita Cabrales, Gerardo Rodríguez Acosta y Diego Cruz Alonso, hijos de funcionarios y empresarios, asistían al Instituto Rougier junto con la víctima.
Después de que Daphne le contara a su padre Javier Arturo Fernández Torres lo sucedido, éste se reunió con los presuntos agresores y sus padres, un día después.
Según relató Fernández, los padres se presentaron apenados y dispuestos a dar un castigo ejemplar a sus hijos.
La familia Fernández pidió tres condiciones para que no se levantara una denuncia y los jóvenes no fueran a la cárcel: Se acordó una disculpa para Daphne, grabada en video porque ella tenía miedo de verlos en persona, explicando las razones de sus actos; que ninguno de los agresores se acercara a la menor y el último requisito era que todos asistieran a un proceso terapéutico.
Sin embargo, aunque las familias de los implicados se comprometieron a cumplir con las peticiones, el padre de Daphne aseguró que en los jóvenes comenzaron en las redes sociales una campaña de desprestigio contra su familia. Entonces, decidieron proceder legalmente.
Según detallan las autoridades, aunque la violación sucedió en enero de 2015, la investigación se abrió con la denuncia de Javier Fernández en mayo, pese al acuerdo que llegó con los padres de los agresores por los ataques en redes contra su hija.
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“En mi inocencia, ignorancia o falta de madurez, yo pensaba que esa noche ellos se “habían pasado de la raya” que había sido un “accidente” porque puede que hubiesen estado hasta drogados y no pensaban lo que hacían, aunque esa “pasada de raya” y ese “accidente” día tras día me causaba un gran dolor, dolor el cual ESCONDIA, por todo la vergüenza y la gran tristeza que sentía, no voy a negar que sí llegué a pensar “si no hubiese llevado esa falda”, “si no hubiese salido”, “si no hubiera sido la última en subir a la camioneta de mis amigos no hubiese sido YO la que quedara a su alcance”.
“NO tienes ni la menor idea de cuantas semanas viví en el “hubiera” pero bueno, gracias a eso el día de hoy puedo darme cuenta que hay maldad en el mundo”, refiere Daphne en su carta a la mamá de Gerardo, a quien una y otra vez le pregunta “porqué NO LO EVITO, NO DIJO, NI HIZO NADA”, señala Daphne a la mamá de Gerardo.
Daphne ha utilizado su red social de Facebook para ser escuchada.
La primera vez lo hizo después de que en los medios de comunicación leyera una y otra vez declaraciones de los padres de sus agresores en su contra y en contra de su padre.
El 28 de marzo, escribió que se había prometido no decir nada al respecto, pero tocó fondo.
“He leído muchos comentarios, de todo tipo, acepto que la mayoría son apoyándome gracias a Dios, de lo que me pude dar cuenta es que la mayoría de las personas que me apoyan o se atreven a comentar, compartir son gente que no conozco, me siento triste porque me siento sola, sé que no es así pero así lo siento, muchos de mis “amigos” y muchos de mis “conocidos” dudaron y me juzgaron (antes de que salieran los vídeos) y aún con los vídeos siguieron o siguen criticando, algunos otros optaron por poner estados “neutrales” como “no sabemos la verdad no hay que juzgar”, escribió.
Daphne aseguró que nunca hubiera deseado estar así de expuesta y juzgada.
Dijo que nunca ha cambiado su versión de los hechos, y que simplemente declaró lo que sucedió ante el Ministerio Público.
“Sí, meses después intenté seguir con mi vida, a los ojos de los demás muchos podrán decir que “estaba bien”, pero ¿quiénes estaban conmigo en las noches cuando lloraba hasta quedarme dormida, cuando me deprimía, cuando destrocé mi cuarto varias veces por enojo e impotencia?
“Dónde estaban todos aquellos que el día de hoy se atreven a juzgarme?”, preguntó.
También declaró públicamente ser una adolescente como cualquier otra.
“Sí he tomado, sí he salido de fiesta, sí he usado faldas cortas, como la gran mayoría por no decir que todas las niñas de mi edad, ¿por eso me van a juzgar? ¿por eso me lo merecía? ¿Por eso pasó lo que pasó? ¿Por andar de noche con mis amigas? Pregunto a aquellos que criticaron e hicieron paginas para atacarme, entonces yo les pregunto ¿PORQUÉ?”, expresó.
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Tras la presión de los medios de comunicación y una manifestación masiva en contra de la violencia hacia las mujeres y donde se exigió justicia para Daphne, la Fiscalía del Estado de Veracruz tardó un año en girar órdenes de aprensión a 3 de los 4 señalados como presuntos responsables.
Ello después de que se difundieron los audios y videos grabados por el padre de Daphne donde los presuntos responsables piden perdón a la joven.
El padre explicó que el audio corresponde a una fecha posterior al día de la agresión, que ocurrió el 3 de enero del 2015, y la mediación se produjo por la intervención de Ricardo Fernández, amigo en común del padre de la menor y de Felipe Capitaine Marín, exalcalde del municipio de Nautla.
En la grabación, Ricardo Fernández le advierte a Enrique Capitaine que “se salvó” de pisar la cárcel gracias a la amistad en común con su padre y en otro fragmento se escucha que Héctor Cruz afirma que reprenderá de forma efectiva a su hijo por la violación y considera quitarle el celular como un castigo ejemplar.
El Fiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras, aseguró que los videos difundidos de los jóvenes pidiendo disculpas no son pruebas que legalmente puedan ser tomadas en cuenta en la investigación.
“Es mentira que haya opacidad, dilación, se está haciendo una investigación seria; mi más alto compromiso con la víctima y mi compromiso de que tendrán justicia”, declaró en diversas ocasiones.
De los cuatro involucrados en el caso, sólo uno enfrentaría un proceso penal por el delito de violación, mientras que otros dos serían señalados por abuso y el último podría salir libre.
El 12 de abril la Policía Internacional (Interpol) subió a su sistema electrónico las fichas rojas de identificación de Enrique Capitaine, Jorge Cotaita y Diego Cruz por lo cual se les busca en más de cien países, luego de que fueron radicadas las órdenes de aprehensión y por versiones periodísticas se supo que los jóvenes salieron del País.
En diversos medios de comunicación se ha informado que Diego Cruz podría estar en Bilbao, España, mientras que Capitaine y Cotaita en el estado de Texas, Estados Unidos.
En caso de que alguno de los jóvenes sea ubicado y detenido, deberá quedar a disposición de las autoridades migratorias del país en que sea localizado, para que se defina su situación jurídica, muy probablemente a través de un procedimiento de extradición.
