Se conmemoró el Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra comunicadores
El Estado de Derecho se está debilitando cada vez más por el incremento de las agresiones contra informadores en México, la falta de investigación y la prevalencia del 90 por ciento en el índice de impunidad.
Así lo denunció la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en el “Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas” –el 2 de noviembre-, al refrendar su compromiso de trabajar con todas y todos los actores sociales para erradicar la violencia contra comunicadores.
Aportó el número de homicidios de periodistas que del año 2000 al 31 de octubre del presente año se ha elevado a 130, de los cuales 13 corresponden a mujeres periodistas; 20 periodistas en total se encuentran desaparecidos, 2 son mujeres, y se han cometido 52 atentados a medios de comunicación, el último de ellos contra las instalaciones de un canal de televisión en Cancún.
Asimismo, demandó al Gobierno Federal más presupuesto y personal capacitado para combatir esa violencia de manera más efectiva, a través del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, adscrito a la Secretaría de Gobernación y de la que la CNDH forma parte.
Consideró que las autoridades hacendarias y legislativas deben asegurar que el presupuesto ordinario con que opera ese Mecanismo no limite o entorpezca sus funciones, sino que pueda hacer frente a la protección de más de 700 beneficiarios que cuentan con medidas de seguridad ordenadas por la Junta de Gobierno, cifra que se está incrementando mensualmente.
Agregó que la impunidad en las agresiones contra informadores y medios de comunicación genera un clima adverso para el ejercicio periodístico, así como espacios de autocensura.
Por tanto, llamó a las autoridades de procuración de justicia para que cumplan con su obligación y se genere certeza y seguridad en el gremio periodístico para el pleno ejercicio de su labor.
La CNDH, en un comunicado, manifestó que la libertad de expresión es un derecho con implicaciones de índole individual y colectiva, por lo que agredir a periodistas y medios “trastoca los fundamentos de nuestra democracia”, ya que generan zonas de silencio ante el temor de ser asesinados, desaparecidos o amenazados por su ejercicio profesional.
En esta fecha conmemorativa, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para condenar todos los ataques y la impunidad de las agresiones contra los y las periodistas, la CNDH destacó que es ocasión propicia para denunciar esa violencia y proponer políticas públicas para revertirla.