Es un instrumento similar al utilizado en 2012, con propiedades y componentes químicos similares en la puntilla, informan
El Instituto Nacional Electoral (INE), otrora Instituto Federal Electoral (IFE), a lo largo de sus 25 años de historia, ha instrumentado en los procesos electorales federales que ha organizado, el suministro de un marcador de boletas en todas las casillas ubicadas en el territorio nacional, para garantizar a los electores emitir su voto, como lo establece la ley de la materia y con el propósito de que éstos funcionen correcta y eficazmente en la recepción de la votación durante las elecciones.
El marcador de boletas es uno de los materiales que ha presentado cambios en comparación con los instrumentos que se utilizaban originalmente, ya que desde 1991 y hasta 2006 fue tipo crayón, que si bien tuvo un buen desempeño en esos procesos electorales, los resultados de las evaluaciones sobre su funcionalidad indicaron la necesidad de mejorarlo.
Ante el efecto de las altas temperaturas imperantes en muchas partes del país, que provocaban su reblandecimiento, desprendimiento de ceras y un efecto de doble marcado en las boletas al doblarlas, se determinó que para las elecciones de 2009, se cambiara por un marcador redondo de color negro, con un diámetro de 6 mm y una longitud de 10 cm, cuya puntilla estaba elaborada a base de ceras, pigmentos y aglutinantes (no de grafito), con cuerpo que recubría la puntilla de madera para protegerla. Este marcador de boletas tuvo un desempeño satisfactorio en las casillas; sin embargo, por sus dimensiones podía fácilmente caerse de la mesa del cancel y perderse.
Para 2012, el Instituto utilizó nuevamente un marcador de boletas pero con cambios significativos en sus dimensiones y forma, siendo entonces de 10 mm de diámetro, 18 cm de largo y un perfil triangular, lo que le daba una mayor ergonomía para sujetarlo, con acabado superficial exterior en color magenta (rosa), además la mina estaba constituida por ceras, pigmentos y aglutinantes (en ningún caso de grafito).
Estas componentes con los que está elaborada la puntilla, evitan que se pueda borrar, a diferencia de los lápices convencionales de grafito, y produce marcas similares a las de un crayón, con mejores propiedades que éste, ya que no se reblandece ni transmite la marca a otro lugar de la boleta, al doblarla para su introducción en la urna.
Para evitar la pérdida de los marcadores de boletas de las casillas, se implementó un dispositivo (sujetador) de hule con un cordón negro que se amarra a la base del cancel, con lo que se garantizó que el marcador no fuera extraído de la casilla por los electores.
En las elecciones del 7 de junio de 2015, el marcador de boletas que utilizarán los electores en las casillas, para el marcado de sus boletas, es un instrumento similar al utilizado en 2012, con propiedades y componentes químicos similares en la puntilla y solo se diferencia en su acabado exterior, ya que ahora es de color negro y se continúa con el uso su sujetador.
Es importante señalar que, el marcador de boletas fue adquirido mediante un proceso de licitación pública, asignando su producción a la empresa CONTI PRODUCCIONES, S.A. DE C.V., quien es distribuidor de la empresa DIXON, fabricante en México; sin embargo, previo a su aprobación para iniciar la fabricación a gran escala, el Instituto envió muestras del proveedor a los laboratorios BUFETE QUÍMICO, S.A. DE C.V. y LABORATORIO DE CONTROL INDUSTRIAL, S.A DE C.V., ambos certificados por la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), para certificar sus características y calidad:
· BUFETE QUÍMICO, S.A. DE C.V., laboratorio que analizó los elementos tóxicos de los marcadores de boletas con base a la norma NOM-252-SSA1-2011. Los resultados indicaron que los lápices cumplen con la norma y son de uso seguro, ya que los valores de toxicidad están dentro de los límites que establece la norma.
· LABORATORIO DE CONTROL INDUSTRIAL, S.A DE C.V., laboratorio que aplicó pruebas de calidad a los marcadores de boletas, bajo la norma NMX-N-086-SCFI-2009, que consistieron en:
· Largo del Marcador
· Resistencia de las Puntillas al Afilado y Escritura
· Eficiencia de Iluminado
· Desgaste
· Resistencia al Borrado
· Acabado Superficial
· Información en el Producto
Los resultados indicaron que los marcadores adquiridos cumplieron con los valores indicados en la norma y las especificaciones técnicas solicitadas al proveedor, principalmente en la prueba de iluminado y borrado, en donde se observa que las marcas están bien definidas y no se borran, ya que dejan marcas visibles sobre el papel.
Además, el Instituto realizó sus propias pruebas para comprobar el rendimiento de una punta, así como la luminosidad o intensidad de la marca y el borrado, para verificar el desempeño del marcador sobre el papel, obteniendo resultados altamente satisfactorios, pues en ningún caso desaparecieron las marcas hechas sobre el papel, identificándose claramente, aun cuando se intentó borrarlas.