Zacatecas. El gobernador Tello encabezó la ceremonia y dijo que habrá justicia en el caso del agente Ramón Barrios
Bajo el mensaje de “en Zacatecas se dará justicia”, el gobernador Alejandro Tello Cristerna encabezó el homenaje póstumo del agente de la Policía Ministerial, Ramón Barrios Castillo, quien murió este martes en el cumplimiento de su deber, en el municipio de Guadalupe.
“Ramón Barrios fue una persona comprometida con su trabajo, pero también con su gente; un policía entregado a esta difícil y desinteresada profesión, en la que todos los días se arriesga la vida con el objetivo de salvaguardar la integridad de todos los demás”, expresó el mandatario estatal.
El oficial recibió un último pase de lista con balas de salva en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEZ), donde sus compañeros le prometieron no claudicar en la lucha contra la delincuencia.
Tello Cristerna garantizó a familiares de Barrios Castillo que recibirán apoyo para salir de esta crisis en la que se encuentran, además de continuar trabajando para devolverle a la ciudadanía una tierra de paz. “En Zacatecas se clama por justicia, en Zacatecas se dará justicia”, advirtió.
Al final de la ceremonia el mandatario montó una guardia de honor, junto a la secretaria General de Gobierno, Fabiola Gilda Torres; el procurador General de Justicia, Francisco Murillo Ruiseco, y el secretario de Seguridad Pública, Ismael Camberos Hernández.
Ramón Barrios perdió la vida este 17 de octubre en la colonia Los Frailes, del municipio de Guadalupe. Al ser su día de descanso, se encontraba de visita en la casa de un familiar cuando escuchó detonaciones de armas de fuego y salió a investigar el hecho, donde encontró a algunas personas discutiendo.
Acudió a mediar el conflicto, pero recibió una agresión armada que le causó la muerte, mientras que los responsables huyeron a bordo de dos vehículos y ahora son buscados por la Procuraduría General de Justicia, las policías Federal, Estatal y Municipal, así como por el Ejército Mexicano.
El agente abatido fue licenciado en Derecho; ingresó el 16 de julio de 2008 a la Policía Ministerial y se profesionalizó constantemente en su servicio al acudir a más de 15 talleres y capacitaciones, donde en cuatro ocasiones fue el alumno más destacado.
A la ceremonia acudieron el Comisario de la Policía Federal, Orestes de Jesús Estrada Miranda, y el Comandante de la Onceava Zona Militar, Guillermo Almazán Bertotto.