Zacatecas. No se limita únicamente a utilizar 'las y los', afirmó la secretaria Adriana Rivero Garza
La Secretaría de las Mujeres (Semujer) trabajará para generar conciencia acerca de la importancia de implementar el lenguaje incluyente y no sexista tanto en las dependencias y entidades de la administración pública estatal como en los distintos sectores de la sociedad zacatecana.
Adriana Rivero Garza, secretaria de las Mujeres, dijo que el propósito es romper con los esquemas tradicionalmente androcéntricos, y cambiar la mentalidad y la cultura de las personas que laboran en el ámbito público como de la población en general, a fin de promover la igualdad entre los sexos y eliminar estereotipos.
Recordó que el gobernador Alejandro Tello Cristerna es impulsor de la igualdad sustantiva. Además, con esta acción se dará cumplimiento al marco normativo nacional e internacional existente, que obliga a los gobiernos a adoptar medidas que contribuyan a la eliminación de la desigualdad entre mujeres y hombres.
Como referente de lo anterior existe el Manual de Comunicación No Sexista, Hacia un Lenguaje Incluyente, documento que fue elaborado y distribuido por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) como una guía básica para la comunicación institucional; de ahí que se pretenda hacer extensivo a todos los ámbitos de la vida cotidiana.
Rivero Garza destacó que el lenguaje juega un papel fundamental para la promoción de la cultura de la igualdad y la no discriminación. Por ello, la aplicación del manual resulta de vital importancia para promover el cambio en la cultura y en la mentalidad.
Refirió que el lenguaje incluyente permite visibilizar a las mujeres y su problemática, así como promover el respeto a sus derechos humanos, la eliminación de estereotipos y la no violencia contra ellas.
Añadió que permite comunicar dimensiones del acontecer cotidiano y práctico del ser humano, a través de éste se manifiestan las asimetrías, desigualdades y brechas que existen entre mujeres y hombres.
“El lenguaje incluyente va más allá de utilizar las y los, niños y niñas, pues forma un conjunto de construcciones abstractas que inciden en juicios, valores y prejuicios que se aprenden y se enseñan, para determinar formas de pensar, actuar y percibir la realidad”, concluyó.