Manuel Ibarra Santos
David Monreal se convirtió con toda la fuerza de la legitimidad (con el 48.7 de los votos a su favor) en gobernador electo de Zacatecas y asumirá su responsabilidad constitucional el próximo 12 de septiembre. Inicia con esto, una nueva etapa de la historia del Estado, en un periodo de monumentales desafíos, a los que se habrá de sumar la necesaria y probable iniciativa de reforma para modernizar la estructura del aparato de la administración pública.
Al cumplirse ese procedimiento jurídico, con la entrega a David Monreal de su constancia de mayoría, el mandatario actual y el entrante, iniciaron la comunicación formal para encauzar, en términos de Ley, el proceso de entrega/recepción de la administración pública del Estado.
Las 15 secretarías, dos coordinaciones, decenas y cientos de áreas de la administración pública estatal centralizada, habrán de ser objeto de una revisión exhaustiva, para que sean entregadas, en su momento, a los integrantes del gobierno que iniciará funciones en el mes septiembre y que encabezará David Monreal, por mandato ciudadano.
Un poco más de mil puestos del primer nivel y mandos medios de la administración pública centralizada y descentralizada en Zacatecas serán sometidos e involucrados a la disección de una escrupulosa revisión, para determinar cuál es el estatus en que se encuentran.
Todos esos espacios de la administración pública, estarán sujetos, como es lógico, a la reestructuración y nombramiento de nuevos titulares, con la llegada del futuro gobierno. Experimentaran un natural sacudimiento.
Es pertinente colocar a la administración pública en la ruta del cambio y modernización. Y ese requerimiento se tendrá que tejer con inteligencia, conocimiento y sensibilidad.
Un gobierno exitoso necesita, efectivamente, de capital humano capaz, honesto, eficiente, con perfiles de calidad y productivo. Pero también de paradigmas de administración pública de vanguardia.
La circunstancia particular que hoy vive Zacatecas, impactado y traumatizado por la pandemia del coronavirus, reclama de reformas de fondo al edificio y estructuras de la administración pública. ¿Hacia dónde apuntarán estas, si es que se dan? El tiempo lo determinará.
Por lo pronto, en su apuesta por impulsar la transformación y el desarrollo de Zacatecas, David Monreal ha puesto en el centro tres importantes componentes: Primero, talento y capital humano de calidad; Segundo, Educación de excelencia; y Tercero, Estímulo a la innovación científica y tecnológica.
Si nos atenemos a estas líneas de acción, diremos entonces que el gobernador electo tiene en perspectiva el impulso de la transformación de Zacatecas, poniendo el énfasis en el desarrollo humano y el bienestar de la gente.
Para cumplir sus compromisos, David Monreal deberá lidiar con cuatro grandes problemas estructurales, que a su vez se han convertido en verdaderos monstruos, que obstaculizan el desarrollo del Estado. Entre ellos encontramos los siguientes:
A.-Los elevados índices de inseguridad y criminalidad; B).-El estancamiento de la economía; C).- Las grandes tasas de pobreza y desigualdad social; y D).- Los rezagos educativos y tecnológicos.
David Monreal llegará al gobierno de Zacatecas con experiencia, capacidad y madurez, pero también con un alto nivel de legitimidad, como el gobernador más y mejor votado de los últimos mandatarios en la historia reciente de Zacatecas.
Eso le otorga al futuro gobernador un bono democrático de apoyo para cumplir con el mandato ciudadano de emprender los cambios y transformaciones que requiere el Estado.
DAVID Y LOS CIUDADANOS:
David Monreal arribará como gobernador constitucional de Zacatecas con el respaldo y apoyo del más alto nivel numérico de votos emitidos por la gente en las urnas.
Considerando las sucesiones políticas en los periodos de alta competitividad electoral en Zacatecas, en especial a partir de la primera alternancia democrática de 1998 a la fecha, los sufragios obtenidos por cada uno de los candidatos triunfadores a la gubernatura, son los siguientes: Ricardo Monreal Ávila, 44%; Amalia García Medina, 46.4%; Miguel Alonso Reyes, 43.1%; Alejandro Tello, 38%; y David Monreal, 48.7%.
En un análisis comparativo del porcentaje de votos acumulados por los candidatos triunfantes a la gubernatura, observamos, por ejemplo, que David Monreal ha obtenido en estas elecciones, el 48.7 por ciento de los votos ciudadanos, diez puntos porcentuales por encima de los que tuvo a su favor Alejandro Tello, en la sucesión del 2016.
David Monreal se erige, así, como el gobernador más votado por los ciudadanos zacatecanos, incluso que el propio Ricardo Monreal, quien en los comicios de 1998 registró para su causa el 44 por ciento de los sufragios.
Por eso, David Monreal llegará al gobierno de Zacatecas con una gran fortaleza y legitimidad democrática, por el extraordinario respaldo que le otorgó la ciudadanía en las urnas.
LA REESTRUCTURACIÓN DEL PODER
Los comicios del pasado seis de junio ya propiciaron una reestructuración y reacomodo de las fuerzas políticas en la entidad, con un giro hacia la izquierda.
Pero lo que realmente importa hoy en día será la tendencia y orientación de las políticas que implemente David Monreal, para promover el desarrollo de Zacatecas.