Filomeno Pinedo Rojas
A pesar de todos los pronósticos de los especialistas nacionales y extranjeros, México elevó su crecimiento durante los últimos cuatro trimestres para ubicarse en un 4.3 por ciento anual, perfilándose a recuperar el nivel anterior a la pandemia, con la ventaja de haber alcanzado un récord histórico en número de empleos formales y lograr contener la inflación muy por debajo de la Unión Europea.
La difícil situación económica mundial que ha dejado una pandemia de dos años y la presente crisis energética global, agudizada por las inexplicables sanciones impuestas por Estados Unidos y los países europeos contra el petróleo y gas rusos, amenaza con paralizar a Alemania y otras naciones desarrolladas que ya cuentan con una inflación no vista en los últimos 40 años.
Baste señalar que de los 27 países que conforman el bloque europeo, en 11 de ellos la inflación es imparable, entre ellos Estonia con 22.4 por ciento, Lituania con 22 por ciento, Letonia 21 por ciento y Holanda (Países Bajos) con 16.8 por ciento. Le siguen Eslovaquia con 14.5 por ciento, Bélgica 13.1 por ciento, Alemania 11.6 por ciento y Austria con 11.5 por ciento.
Nada que ver con el 8.5 por ciento de inflación que registró México hasta el 15 de octubre, según el reporte del Instituto de Geografía e Informática (INEGI), responsable de llevar el registro del crecimiento de precios en nuestro país, que también señala que, en la misma fecha del 2021, se había alcanzado el 6.1 por ciento.
Es importante señalar que, contrariamente a lo que auguraban los críticos del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en el sentido de nuestro país caería en la peor crisis, la economía nacional sigue creciendo por cuarto trimestre consecutivo, registrando en los tres últimos meses crecimiento del 1% con lo que llega ya al 4.3 comparado con el 2001 y muy por encima del registrado por Estados Unidos, que según los datos de la Oficina de Análisis Económico del departamento de Comercio, aquel país solo obtuvo 0.6 por ciento de aumento en el último trimestre, para alcanzar un 2.6 por ciento anualizado, a pesar de las medidas de control de la Reserva Federal.
Aparte de lo anterior, es importante decir que el Peso mexicano, se mantiene como una de las tres divisas del mundo que, en lugar de devaluarse, se aprecia más, frente al dólar norteamericano, lo que no ocurre con la moneda de la Unión Europea (el Euro), el Yen Japonés o la Libra Esterlina del Reino Unido que han tenido un marcado descenso, muy al contrario de lo que han difundido los enemigos de la Cuarta Transformación que encabeza López Obrador.