Zacatecas. Buscará el ex candidato de Morena invalidar la elección a gobernador en los tribunales estatal y federal
“Seguimos recabando evidencia para demostrar el atraco electoral que sufrimos los zacatecanos”, dijo
“Lucharemos hasta el final para invalidar la elección a gobernador, pues fue un proceso vil, canalla y perverso y no podemos permitir que en este país, y en Zacatecas siga empobreciéndose la democracia”, sostuvo David Monreal Ávila, en conferencia de prensa.
Aseveró que su definición política consiste en no reconocer los resultados del proceso electoral pasado, por el cúmulo de irregularidades que se dieron y que le quitaron el derecho de elegir a los zacatecanos.
Le pedimos a la sociedad que nos hagan llegar videos, testimonios, fotografías, evidencias para documentar y acreditar el atraco electoral, pues este proceso aún no concluye y se sigue recabando evidencia.
Refirió que se han realizado dos impugnaciones ante el Instituto Nacional Electoral y el IEEZ, por el rebase del tope de gastos de campaña del PRI gobierno, por el excesivo gasto, por más de 100 millones de pesos.
Dijo desconfiar de la imparcialidad del órgano electoral local, por lo que adelantó, que seguirá en la lucha a través del curso jurídico y en su momento acudirá a la Sala Regional, pero una vez que se agote el proceso.
Llegaré hasta la última instancia, dijo, pues no podemos permitir que en Zacatecas se haya violentado de tal manera el proceso, pues según algunos analistas políticos nacionales, jamás en la historia se había visto una elección tan perversa, tan sucia y tan plagada de irregularidades.
Monreal Ávila precisó que seguirá sometiéndose al imperio de la ley, además de considerar “la perversidad con la que se ha conducido el PRI gobierno”, dijo.
Por otro lado señaló al gobierno federal como autoritario, abusivo, “se observa un gobierno asesino, como ya sucede en algunos estados de la República”.
Finalmente, expresó su respaldo absoluto a la lucha de los maestros, siempre sostuve, dijo, que la reforma educativa fue un error y la autoridad sigue equivocándose, pues no es con el garrote como lo van a resolver.